Vivimos en un siglo donde estamos a mil por hora, donde la tecnología, las tendencias, la necesidad inútil e innecesaria de querer cosas materiales. En donde nada es suficiente y siempre hay algo por cual estar preocupado.
Pero aveces tenemos que permitirnos abrir un poco mas los ojos y dejarnos a la disponibilidad de las oportunidades, de arriesgarnos a tomar caminos, dejar a un lado las listas de pros y contras, de conocer personas, explorar rincones de nuestra alma que jamas uno hubiera conocido.
Hagamos algo distinto, sigamos nuestro corazón, miremos siempre al frente porque lo que ya quedo en el pasado, se queda atrás y eso no se recupera nunca mas.
Olvidémonos de lo malo porque siempre al final de la tormenta sale el sol. Permitamos dejarnos llevar y soltar esas ataduras que nos impiden seguir nuestro sueños, porque las cosas buenas siempre llegan a su debido tiempo.
Digamos mas te quieros, abracémonos mas, tomemos el tren incorrecto y vayamos a cualquier parte. Tenemos tantas cosas por las que decir siempre gracias, desde el primer instante en que nos levantamos, de poder caminar, respirar, compartir momentos con nuestras familias, amigos o con nosotros mismos. De disfrutar una rica comida, de recordad las hermosas cosas por lo que nos hace querer seguir haciendo lo que nos gusta.
Les puedo garantizar que no todo es gris ni todo rosado, pero siempre, siempre hay algo lindo que nos espera a la vuelta de la esquina, simplemente tenemos que sacarnos las vendas de los ojos. Porque todo lo malo va a pasar y lo bueno va a estar ahí esperando a ser recibido.
-Nathaliacaceresok
ph: coisla
No hay comentarios.:
Publicar un comentario