Todo momento hay que disfrutarlo, no solo los buenos, sino también los malos. Eso momentos que la vida nos da el empujón mas feroz y bruscos.
Esos momentos que si tenemos que llorar, lloremos. Que todas nuestras entrañas y órganos sientan todo el vibrar de la sensación de la tristeza . Una vez le dije a mi hermana que si nos duele algo ( lo que sea) es porque estamos mas vivos que nunca. Porque sentir es vivir, y el dolor como la felicidad es vida.
Yo tengo trastorno de ansiedad, es algo por lo que empece cuando estaba en tercer año de secundaria. Al principio no sabia nada sobre esto y nunca entendía porque siempre tenia esa sensación de llorar, de vivir sensible. Aparecía por momentos, y aveces ya ni volvió por meses. Pero en estos últimos años, desde que termine la secundaria mi ansiedad fue volviendo poco a poco, volvía para aturdirme por las noches y dejarme estar todo el tiempo pensando en soluciones para mi futuro, en tratar de enfocarme en que quiero hacer, que quiero ser, que quiero seguir y asi un monton de cosas. Mi corazon a gritos me dice que es lo que mas quiero, y mi mente planteandome la duda si es seguro lo que quiero. Vivo con la necesidad de ser la mejor, quiero dejar una gran huella en este mundo, quiero dejar un legado en mi vida para no ser nunca olvidada. Deseo con todas mis ganas poder tranquilizar mi ansiedad y poder encontrar la confianza que tanto deseo.
Voy aprendiendo poco a poco con esto que tengo, aunque no es grave, porque no pienso matarme. No para nada, yo quiero un mundo lindo para mi futuro, poder ayudar a todos lo que me ayudan y poder demostrarle a esos que no confiaban en mi de que no lograría ser nadie. Me conformo con la idea de que hoy no estuve mal y que aunque mi ansiedad solo me interrumpe se perfectamente que algun dia podre cumplir mis expectativas.